Erika Castilla es una joven diseñadora gráfica comprometida con su isla. De algunos de los lugares más emblemáticos Fuerteventura surgen muchos de los conceptos y de las estampas que luego plasma en su producción artística. De láminas de autor con su visión particular de la Isla hasta camisetas con motivos tradicionales vinculados con el mar y el medio ambiente. Miembro fundadora del colectivo Artistas por Fuerteventura que agrupa a jóvenes creadores asentados en la isla majorera, Erika Castilla asume los cambios que imponen los tiempos actuales, pero valora mucho la fuerza y la intensidad que todavía mantiene la naturaleza. Con ella recorremos tres lugares especiales de Fuerteventura.
Bahía de Corralejo
El primer rincón majorero de Erika Castilla es el sitio de sus recreos. En la bahía de Corralejo, especialmente en la zona de la playa de La Galera y su proyección hacia el sur camino de Punta Prieta, transcurrieron muchos días de asueto infantil junto a su familia. Entre la alegría de descubrir la vida junto al mar y las primeras excursiones silvestres. “Muchos de los mejores momentos de mi vida han transcurrido en la playa de La Galera, en estos charcos crecí mientras jugaba”, explica la diseñadora e ilustradora majorera sin esconder su pasión por el mar y su influencia temprana. “Y creo que, inconscientemente, aquí también se empezó a moldear mi personalidad y mucho de lo que ahora soy”.
Carreteras majoreras
De la costa a la isla entera. Amante de la naturaleza, Erika Castilla no esconde que otra de sus pasiones es viajar en coche por Fuerteventura. En sus carreteras logra lo que otros encuentran en el retiro y el silencio. “Lejos de aburrirme, me desconectan del mundo. He pasado buenos ratos conduciendo o viajando en coche. Han sido tantas horas, tantos días, tantos años de viajes que hasta ya tengo mis carreteras preferidas“, indica. Y enumera: de Lajares a Majanicho y de La Oliva a El Cotillo. “Muchas carreteras te enseñan lo que es la Isla, sus paisajes, su cielo y la presencia del mar. Me gusta viajar desde Tefía a Betancuria y ver los cambios del paisaje según cambia la luz“.
Puerto de El Cotillo
Otra vez el mar. En la esquina noroeste de Fuerteventura, la bahía de El Cotillo reitera la invitación majorera al disfrute del mar. “Este muellito es una de mis estampas preferidas de toda la Isla“, afirma Erika Castilla, que suele visitar la localidad para disfrutar de un buen rato de charla y el solaz marino. “Pasear por aquí con tranquilidad, olvidando las prisas y detenerme a tomar una cerveza en algunas de estas terrazas es una de mis aficiones preferidas“. Gusta también que aquí el mar suele estar bravo. “Este mar me transmite una energía indescriptible“, indica, “porque, en el fondo, lo que más me gusta de la bahía de El Cotillo es su aspecto casi salvaje. Su entorno no ha cambiado mucho“.